Novela en el blog "Recuerdos del pasado" cap 9

Capitulo #9:
Invitaciones

Nos levantamos temprano y fuimos al comedor para desayunar. Ahí vi a Pablo mirándome fijo, me dio un poco de miedo. Al rato apareció Nicolas, que por cierto, saludo muy cariñoso a Eugenia. Después me saludo a mi dándome un gran abrazo como es común de él. Y dejo para lo último a Candela. Entonces, después, se fue a sentar al lado de Pedro y, su amigo, Agustin, el cual Cande no dejaba de mirar. Después del gran desayuno, teníamos clase de instrumentación otra vez. Me fui con Eugenia hasta el salón donde se dicta esa materia y nos sentamos en el piso para escuchar a las profesoras.
-Desayunaron bien chicos? –pregunto Emilia, la profe de canto y todos respondimos con un ‘si’
-Genial, bueno, aca como ven, esta Emi. Ustedes saben que vamos a empezar con este primer trabajo practico de a dos, y ya están todos divididos para empezarlo. Lo que tienen que hacer es elegir el instrumento y la canción que desean, pero grupal que sea, nada de discusiones plis –rogo Jimena, encargada de esta idea
-Compa, permiso –pidió Pedro, sentándose a mi lado- tenemos que trabajar juntitos
-Asi parece
-Che, viste a mi hermana? –buscando con la mirada a la rubia

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-Sí, esta allá con Nico –señalé y vimos como los dos reían
-Mucha risita veo, algo ocultan
-Que pesado –reí – dejala, se están conociendo
-En que sentido? –pregunto mirándome preocupado
-En el buen sentido. Podemos empezar con el trabajo por favor?
-Sí, dale, perdón. Pero soy hermano mayor, necesito cuidar a mi hermanita
-Pedro, tiene diecisiete años –dije, obvia
-No importa, sigue siendo mi chiquita
-Ok –volví a reír- que música escuchas? Digo, para el trabajo
-Mira –pensó- escucho de todo un poco, de reggae hasta lentos
-También tangos? –pregunté graciosa
-No, tampoco la pavada. Tengo una banda de la cual me gusta mucha
-Cual? –consulté curiosa
-Nose si la conoces. Oasis, te suena?
-Me estas jodiendo. Ami también me encanta Oasis! –sonriendo
-Bueno, entonces nos vamos a llevar muy bien –sonrió, canchero
-Perdón que me meta –dijo una voz muy agrandada- gordo, tenemos clase de actuación
-No puedo Maria, tengo que hacer un trabajo para esta materia
-Pero también hay que hacer uno con Nicolas. Podes venir por favor?
-Dije que no, no entendes? –y la miró
-Tan ocupado estas? –pregunto irónica
-Anda Pedro, no hay problema. Yo me encargo de la profe y del trabajo –aclaré
-Pero…
-Enserio –lo interrumpí- no te hagas drama, anda
-Bueno, gracias –se levanto del piso y salió con su novia.

Me acerque a los dos rubios que seguían riendo- interrumpo algo?
-Enana, que haces?
-Y mi hermano? –consulto la rubia, dejando la risa de lado
-Se fue con la novia a actuación –conté
-Y te dejo sola? No lo puedo creer! Como te va a dejar asi?
-Ey, no te preocupes Eugenia, no hay problema. Nos juntamos después para el trabajo. Y ustedes? Digo, mucha risita suelta
-Nada, nada para preocuparse –aclaró Nicolas, después de fijar su mirada en la rubia- nos estamos amigando, nada malo no?
-Obvio –y ella volvió a sonreír- no tenes problema en que este con él?
-Na, es mi amigo, no un esclavo. Aparte, hacen linda parejita –los miré cómplice y me levante del suelo para irme a otro rincón del salón

Horas y horas en esta clase de instrumentación. Cada uno pasó al piano y tocaba la melodía que se le ocurría en el momento. Yo, como siempre, tocando aquella misma canción que mi abuela me tarareaba de chiquita. Me sonó medio raro que Eugenia la haya conocido, pero buen. Después de eso, me fui con Nico a merendar a la cocina. Estuvimos un rato largo hablando hasta que cada uno volvió a su habitación correspondiente.

-Que tarada! Me equivoque… -escuché quejarse a Candela mientras escribía en una pequeña hoja blanca
-Que haces Cande? –consulté
-Una invitación para mañana domingo, como no hay clases…
-Y para quien la invitación? –pregunté
-No te rías. Para Agustín…
-Na! Enserio mañana salís con él? –dijo Eugenia, mientras estaba sentada en su cama con la notebook en sus piernas y miraba aquella pantalla
-Asi es, espero que no me rechace
-No creo, tenete fe. Pero que onda con él? –volví a preguntar
-Nada, hoy estuvimos hablando por un gran rato y… me cayó demasiado bien. Aparte, el primer domingo acá quiero pasarlo bien viste
-Chicas, mañana no me esperen porque salgo! –avisó Eugenia
-Y a donde te vas vos? –voltee mi cabeza para consultarle
-Tengo un encuentro con alguien, el cual no conozco, pero me encanta la intriga –sonrió divertida
-Tene cuidado con eso, a veces no es muy bueno –le dije, preocupada
-No te preocupes Marian, todo va a salir bien
-Claro –agregó Candela mientras pasaba la lengua por el sobre- Marianita, me harías un favor chiquitito, chiquitito?
-Sí, dale –me senté en la cama donde estaba acostada
-Le llevas el sobre a Agus?
-Yo?
-Sí, vos. Toma –me entrego el sobre- dejaselo en la mesita de luz
-No! Ni loca! Anda vos che, si vos vas a salir con él
-Ay dale negra, no seas mala –opinó Eugenia
-Sí, pero como entro?
-Con esto… -y la delgada me tiró las llaves del cuarto de los chicos- se las pedí a Gimena
-Voy a quedar como una chorra!
-No, dale. Cualquier cosa me echas la culpa a mí, si? Plis! –rogándome

Llegue a la puerta de la habitación de los hombres. Pensé en dejar el sobre por debajo de la puerta, pero Candela me hizo un pedido, y debía cumplirlo.

-Quien me manda a hacer estas cosas ami? –abrí la puerta delicadamente y la cerré- parezco una chorra. Ahora, cual es la cama de Agustin? Será esta? No, esa es de Nico –desvié mi mirada hacia la mesa de mi amigo rubio- ay me muero, tiene una foto conmigo- la agarré y me la quede mirando- ah cierto, la invitación –deje la foto donde estaba- ma’ sí, yo la dejo en esta cama –y deje el sobre en la cama del medio
-Que haces aca peti? –escuche preguntar de alguien, el cual reconocí la voz. Al dar media vuelta, me encontré con Juan Pedro todo mojado y con una toalla que solamente tapaba la parte de abajo.