En los transcursos de los dias estamos subiendo información que fue borrada en nuestro blog, debido a unos problemas ajenos al blog. Además de esto, estaremos haciendo reformas y algunos cambios en el blog.
Sepan disculparnos!

jueves, 15 de octubre de 2009

Novela "Recuerdos del pasado" cap 34


Recuerdos del Pasado

Capitulo #34: Nosotros

-La verdad que muy buena la obra eh! –dije, mientras apoyaba la cartera sobre mis piernas ya sentada en el auto de Pedro regresando a su casa
-Obvio, todo lo que yo elijo esta buenísimo –dijo Eugenia, sentada atrás, con el tarro de pochoclo y comiendo de él- chicos, no me van a decir que es lo que interrumpí?
-No Eu, no interrumpiste nada –dije, mirando hacia delante
-Bueh, tampoco nada –acotó Pedro mientras manejaba- digamos que interrumpiste la dulce espera para nosotros
-Estas embarazada?! –grito la rubia asomándose por entre los dos asientos y clavando la mirada en mí
-Eugenia! –le devolvimos el grito los dos juntos a coro
-Bueno che, perdón. Cierto que ni siquiera se besaron, como van a quedar embarazad... –abrió los ojos ampliamente- Jodanme que interrumpí el primer beso –me miré con Peter y no contestamos- eso lo tomo como un sí, porque el silencio dice muchas cosas a veces. Y ustedes se estuvieron por besar, no lo puedo creer. Ahora, que tarada que soy, como no me di cuenta –hablando rapidísimo- igual hay cosas que no me cierran. Por ejemplo, me acuerdo cuando Peter estaba tirado en el piso en nuestro cuarto, me dijeron que esta… -dejó de hablar ya que su hermano frenó de golpe el auto y cayó hacia adelante tirando todo el pochoclo
-Cayate nena! Cayate! –le gritó al darse vuelta

Click AQUI para seguir leyendo...


-Ami no me gritas eh. Bajame los humitos, porque a pesar de todo sigo siendo tu hermana y soy la menor, que digo la menor, la única! y tenes que respetarme porque –la volvió a mirar de muy mala manera- está bien, perdón, perdón, me cayo –y Peter prosiguió conduciendo
-Che, me mando un mensaje Nico –dije mientras miraba mi celular- pregunta si les jode que venga a cenar con nosotros
-No, decile que no hay problema –me dijo Pedro, al doblar en una esquina
-No, decile que si hay muchos problemas –habló Euge al agarrarme del hombro
-Perdoname Euge –comencé a hablar- pero no podes dejar de ver a alguien por lo que sentís. Tenes que hablar con él.
-Sí, pero es un tarado. No le importó nada y me part… -volvió a frenar de golpe el auto
-Y te que? Que vas a decir? –pregunto Peter dándose media vuelta para mirarla fijo a los ojos
-Que me part, me partió un dedo. Sí, claro, osea, literalmente –mintió- estábamos jugando y me dobló el dedo sin querer, obvio, y bueno, por eso dije que me enoje porque… porque
-Porque no le pidió perdón –proseguí la mentira- porque cuando a Euge no le pedís perdón es como un golpe al alma, no Euge? –la miré
-Sí, sí, obvio. Es eso hermanito. Porque, que pensaste?
-Nada, mejor no hablo –y nuevamente puso primera para arrancar- nosotros dos vamos a hablar muy seriamente
-Con Lali? Que, le vas a declarar tu amor asi como Romeo a Julieta? –pregunto la rubia, sonriendo
-No nena, con vos voy a hablar seriamente. A Lali la dejo para lo último
-Porque a lo ultimo va lo mejor, no? –Volvió a preguntar Eugenia y su hermano volvió a frenar el auto y la volvió a mirar con una cara algo enojada- está bien, perdón, no hablo mas

Creo que tuvimos una hora de viaje del centro hasta la casa de los chicos y, más o menos, Pedro habrá frenado el auto unas quince veces ya que Eugenia se ponía demasiado densa en algunos casos. Cuando por fin logramos llegar a la casa de los hermanos, los cuales me hicieron reír todo el tiempo con sus discusiones sin sentido, nos encontramos con otro auto estacionado en la puerta y Nicolas parado allí esperándonos con gran impaciencia. Nos saludo a cada uno, pero al llegar a Eugenia hubo como un silencio en el beso, ya que ella no omitió ruido alguno. Entramos a la casa y fue cuando el rubio me entrego un pequeño bolso lleno de ropa que mi mamá me había mandado por medio de él. Lo llevé a la habitación de mi amiga y cuando volví a bajar al living me encontré con mis dos rubios hablando sentados en el sillón. No quise interrumpir y caminé hacia la cocina, en donde estaba Peter preparando la mesa para la cena de cuatro. Solo sonreí y me conduje hacia la mesada para preparar una ensalada después de haberle pedido las cosas necesarias a Pedro. Ninguno de los dos habló, solamente sonreíamos cada vez que cruzábamos miradas. Asi somos nosotros, nos comunicamos por medio de sonrisas. Al rato apareció Eugenia algo más calmada y contenta, y se dirigió directamente hacia mi lado.

-Te ayuda amiga? –me pregunto al verme cortar el tomate en rodajas
-Dale –solo dije
-Pipu, ayudalo a Nico a subir la cama del sótano a mi cuarto para que duerma Lali
-Ok. No hagan lío eh, porque después limpian ustedes –dijo
-Sí, sí, nosotras siempre –irónica, Euge. Y su hermano salió de la cocina
-No me digas nada –la miré y deje el cuchillo sobre la mesada- hablaste con Nico, se soluciono todo, te lo chapaste otra vez y son felices
-No tonta –rió mientras me ayudaba- ojala fuese todo tan simple. Si te puedo decir que hablamos, ya le dije todo lo que siento por él y listo, ya está. Cerramos ahí
-Como ya está? Le dijiste todo lo que sentías y no te dijo nada? –pregunte sin entender y me miró con una gran sonrisa y gritó para luego abrazarme
-No, no. Cuando yo le conté todo, él me dijo que algo le pasaba cuando me veía pero no sabía que, y que todo lo que hagamos sea a tiempo y sin apresurarse
-Osea que…
-Que gusta de mi! –completó la frase y solo la abracé
-Viste, te dije tonta que él algo por vos tenía que sentir
-Sí, re lindo. Igual seguimos siendo amigos, asi como vos con mi hermano. Aunque ya es distinto, porque los dos saben lo que sienten –me miró al comenzar a cortar cebolla
-No para, lo de nosotros es muy distinto. La cosa comenzó con un juego, pero llego un momento que los dos no resistimos mas. Igual nosotros nos sentimos bien asi
-Nosotros, nosotros, nosotros. Mucho nosotros pero nada de acción –me miró- yo todavía sigo esperando el beso amiga
-Si no hubieses interrumpido –dije en un tono de voz bajo
-Que?
-Digo que, hay que esperar a que sea permitido
-Permitido? Desde cuando hay que pedirle permiso a alguien para partirle la boca? –pregunto mientras reía
-A quien vas a besar vos? –consultó alguien al entrar al lugar en el que nos encontrábamos cocinando. Y nos volteamos unos cuarenta y cinco grados para ver a los dos amigos allí parados
-Ay Peter, no jodas. Que guardabosque che! Todo te tengo que contar?
-Obvio, como yo te cuento a vos, vos también tenes que contarme a mí. Nosotros somos hermanos, no sé si sabias
-Muy bien, muy bien Pedrito –golpeó su espalda Nicolas- asi me gusta. Y eso también va para vos petiza. Como yo te cuento todo, también tenes que contarme a mí. Nosotros somos amigos
-Y a mí también –agregó Peter mirándome- digo, también soy tu amigo, no? Tendrías que contarme todo –remarcando la última palabra
-Bueno eh, mira que es una nenita chiquitita –dijo Nicolas
-Lo único que me falta –dije- que dos hombres vengan a controlar mi vida –les revolee el repasador que tenía en mano- nosotros solo somos nosotros –reí junto a Euge- cenamos?


0 comentarios:

Google Traductor

¡Traduci el blog a tu idioma!

Yups.tv la tele en un click

Click en la imagen para ver LA TELE EN UN CLICK...