Novela "Año nuevo, vida nueva" Cap 6 : Miedo

Capitulo 6; Miedo

El miedo es un sentimiento natural en las personas, es una especie de alarma que nos alerta de algún peligro y, por ende, activa nuestra vigilancia, nos hace estar más pendientes, incrementa la precaución, y hace que nos protejamos, entre otras cosas.
- ¿Tenés hora? – Pregunto Mariana acercándose a él-
- Si – Respondió y miro su reloj- Son once y cuarto.
- Gracias – Agradeció tímidamente, tratando de no mirarlo-
- ¿Te pasa algo? – Consulto Pedro girándola-
- No. ¿Por qué? – Quedo dura frente a él, sin saber que hacer-
- No se, parece como si tuvieras vergüenza, o algo. Sos tímida parece. –Murmuro al ver que no respondía-
- No te creas – Aseguro Lali-
- ¿Entonces? ¿No sos muy de hablar?
- Tampoco, hablo y hasta por los codos, te recomiendo mantenerme en silencio – Bromeó haciéndolo reír-
- Igualita a Euge entonces – Comento sonándose los dedos-
- ’Euge. Ya la tenía que meter. ¡Le encanta!’ pensó para si misma ¿Estuviste mucho tiempo con ella? – Pregunto para seguir el tema-
- ¿Estar de novios decís? – Lali asintió- Estuvimos un año y tres meses de novios, antes de eso habíamos estado cinco meses saliendo. Y ahora, entre otras y otros.
- No, estuvieron poco – Ironizo arqueando sus cejas- ¿Terminaron por algo grave? – Insistió al estar interesada-
- Ni ahí. Terminamos al pe.do nada más, porque después de que terminamos seguimos saliendo. – Respondió colocando sus manos en su bolsillo- ¿Vos? ¿Tenés novio?
- No, ni tuve. Salí con muchos, pero no anduve de novia con ninguno. En definitiva son todos hombres, todos iguales. - Y suspiro-
- Bueno, gracias por lo que me toca – Ironizo riendo-
- Sos hombre, vos sabrás.
- Aja – Expreso con un movimiento de cabeza- También se que ¡te estás caga.ndo de frío! – Exclamo al mirarla y reír reiteradas veces-
- Si. ¿Te animas a acompañarme a la cabaña? Tengo frio y no te voy a pedir que me abrases porque no tengo ganas de bancarme a los bolu.dos jodiendo – Explico ella-
- ¿Qué bolu.dos? Estamos solos. – Comento al mirar para ambos lados- Bueno, creo –Agrego después.-
- ¿Qué quisiste decir? – Pregunto al mirarlo a la cara-
- ¿Qué estamos solos? – Ironizó incrédulo Piter-
- Bueno; no importa. ¿Me acompañas o no?
- Te acompaño – Finalizo y comenzaron a caminar-

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Y en cada paso reinaba el silencio. Ya habían agarrado los dos esa confianza necesaria como para estar un rato solos y saber de que hablar. Pero hasta ahí. No se seguían el juego que ellos mismos creaban ni entendían las indirectas. Hablaban, solo eso. No se ponían de acuerdo, o hablaban todo de repente, o no tenían tema. O se animaban completamente, o no se animaban. Pero venían bien. Era su primer día, la primera noche y ya mantenían, por más corta que fuera, una relación de ‘amistad’. Llegaron hasta la cabaña, donde Lali tomo un buzo y volvió a salir. Pedro se encontraba sentado en el escalón mirando hacia adelante. Lo acompaño, sentándose casi pegada a él y recostó su cabeza sobre su hombro. Juntos comenzaron a apreciar aquel paisaje que se les presentaba y el agradable silencio. Mariana levanto su vista para observar como los ojos de Juan Pedro se perdían en el cielo estrellado. El celular del chico comenzó a vibrar reiteradas veces hasta que el mismo oprimo el botón de leer.
Tienes un nuevo mensaje de Bauti
“ Piter, ¿me dejas jugar con tu play estos días? ”
Inclino el teléfono para que Lali pudiera leer aquel mensaje y rieron los dos juntos. Respondió el mismo para después dejar que ella diera comienzo a una nueva charla.
- ¿Cuántos años tiene? – Consulto la morocha con una sonrisa en su rostro-
- Once –Respondió y guardo el celular- ¿Vos? ¿Tenes hermanos?
- Si, tengo uno. Hombre, por cierto. – Pedro rio- Insoportable, idio.ta también.
- ¿Es muy cuida? – Pregunto mientras rascaba su cabeza-
- No, solo un poco – Respondió con sarcasmo- Aparte de que se vive metiendo en mi vida y no me deja hacer nada porque dice que soy muy chica y me vive remarcando que tenga cuidado con los chicos que salgo. Eso es querer joderle la vida a una persona. ¿No te parece?
- A mi me parece que te quiere cuidar, digo, no creo que quiera joderte la vida si te quiere. – Comento él mirándola fijo-
- ¿Si me quiere? Ese es el problema, no me quiere – Aseguro Mariana-
- Es tu hermano, ¿Cómo no te va a querer?
- No queriéndome. No tengo la suerte de tener un hermano como debes tener, que te quiera. Tampoco un padre. – Respondió con su voz consumida en tristeza-
- ¿Decís que tu padre no te quiere? – Pregunto frunciendo el ceño-
- Si. Bueno, si se lo puede llamar padre, es una mierda, a la cual le tengo mucho miedo que cago totalmente mi vida y la de mi madre. – Explico con un gran dolor-
- ¿Te molesta hablar del tema?
- ¿De mi padre? No, me duele un poco, pero en definitiva es la verdad. – Respondió suspirando dos veces- ¿A vos te jode que te hable de esto?
- Nada que ver, si queres desahogarte, soy todo oído.
-Gracias – Pronuncio a lo bajo para después besar la mejilla de Pedro-
Y se perdieron los dos en aquel beso. Pedro quedo impactado ante la acción de Mariana, quien no lograba comprender porque lo había hecho. La miro sonriéndole suavemente y en efecto ella se alejo unos centímetros. Tenía miedo . Tenia miedo a enamorarse para mal o cagar la vida de su mejor amiga, a salir nuevamente lastimada o a ilusionarse en cosas que no serian como ella las pensaba. Pero lo que todavía no sabía era que ya estaba enamorada.